En la actualidad muchos padres están preocupados por el uso que realizan sus hijos de los Smartphone. En el artículo se presentan sugerencias para acompañarlos en el uso responsable de mismo.
Cuando los padres le compran el primer celular a su hijo, lo realizan desde una relación de confianza. Convencidos que lo acompañan en el crecimiento y logros propios de cada edad. Pero no siempre le brindan recomendaciones y ponen algunas condiciones para su uso.
Los padres en ese momento tienen la oportunidad de regular y prevenir algunos problemas que suelen presentarse entre niños y adolescentes por el mal uso de las nuevas tecnologías. Seguramente algunos acuerdos previos, con sus hijos, le facilitarán intervenir cuando las cosas se compliquen.
Es por ello, que me resulta interesante compartir, con padres de niños y púberes, una carta, que circula por las redes sociales, de una madre que le regala un celular a su hijo y le pone condiciones, a mi entender preventivas.
Algunas de las normas y regulaciones planteadas, pueden parecer exageradas, pero la idea de establecer un contrato, es buena. Sobre todo si entendemos que, en la actualidad, los padres tienen una nueva función, la de enseñar a sus hijos a convivir de manera saludable con la tecnología.
Lo más probable que ante estos condicionamientos, la primera reacción del hijo no sea positiva: “¿Por qué así? ¿Por qué tengo que hacer esto? ¡A mis amigos no le dicen nada! ¡No lo quiero de ese modo!
Si los padres conocen y comprenden las consecuencias que puede tener el mal uso de un celular, tal vez se animen a plantear algunas de estas condiciones a sus hijos. A continuación transcriben los puntos más relevantes de la carta que le mencionara.
- Si suena, responde. Es un teléfono. Di hola, sé educado. Nunca ignores la llamada si es de tu padre, o de tu madre.
- Vamos a tener horarios. Danos el teléfono a las 20 hs. si al día siguiente tienes clases, y a las 22 hs. el fin de semana. Se apagará durante la noche y se volverá a encender al levante. Respeta los horarios de las otras familias, como a nosotros nos gusta que también se respete.
- Ponele contraseña. Pero estarás siempre dispuesto a permitir mi acceso cuando te lo pida. También es mi responsabilidad, como padre, lo que hagas con el teléfono.
- El teléfono no irá contigo al colegio. Conversa con la gente con la que luego te mandas mensajes. Es una habilidad social que necesitas desarrollar.
- Si se te cae a la bañera, al suelo o se rompe, tú eres el responsable de pagar la reparación. Debes tener ese gasto previsto.
- No uses la tecnología para mentir o engañar a nadie. No participes en conversaciones que pueden herir a otros. Sé buen amigo o al menos aléjate de esas situaciones.
- No envíes mensajes, correos o contactes con gente con la que no lo harías en persona.
- No converses por el celular con las personas a las que no traerías a casa.
- Nada de porno. Busca en internet información y compártelo conmigo. Si tienes cualquier duda pregunta a alguien. Preferiblemente a tu padre o a mí.
- Apágalo o ponlo en silencio cuando estamos en la mesa o cuándo estés hablando con una persona. En cines y demás. No eres maleducado, no dejes que un celular cambie eso.
- No envíes o recibas imágenes de las partes íntimas de nadie. No te rías. Algún día estarás tentado, aunque seas muy inteligente. Es peligroso y pude arruinar tu adolescencia. Es una mala idea. El ciberespacio es más grande y poderoso que vos. Y es difícil hacer que algo desaparezca, incluida la mala reputación.
- No hagas fotos y vídeo de todo. No hay necesidad de documentar tu vida entera. Vive tus experiencias. Se almacenarán en tu memoria para siempre.
- De vez en cuando el teléfono en casa y siéntete seguro con la decisión. No es una extensión de cuerpo. Aprende a vivir sin ello.
- Mantén los ojos abiertos. Mira el mundo que pasa a tu alrededor. Mira por las ventanas. Escucha a los pájaros. Da paseos. Habla con la gente. Pregúntate sin usar Google.
- Si pierdes el rumbo te quitaré el teléfono. Nos sentaremos a hablar sobre ello y empezaremos de nuevo. Tú y yo estamos siempre aprendiendo. Te quiero mucho y estamos juntos en esto.
Lic. Amado Pauletti, Piscólogo (M.P. 2154), Presidente de Fundación Clínica de la Familia
